En las sociedades occidentales demasiado a menudo hemos querido analizarlo todo, medirlo todo, acercarnos al conocimiento de un modo exclusivamente científico, eliminando a los dioses del cielo y no dejando espacio a la sombra, que es el espacio donde la persona tiene más soberanía, donde el artista interpreta los sueños individuales y colectivos.
NO BORDERS trata de los refugiados, pero sobre todo trata de nuestra propia sociedad. Los refugiados nos ponen a prueba poniendo en relación la sociedad que decimos ser, la que somos y la que queremos ser.
La exposición de arte social ha sido una propuesta para involucrar a la comunidad artística en el proyecto, amplificando su impacto entre los artistas de la isla y de todo el territorio.
140 artistas donaron sus obras para hacer copias ilimitadas. De cada obra se realizaron cuatro reproducciones, consiguiendo una recaudación de 1.380€.
Al final del proyecto a los artistas se les envía la memoria del proyecto y un formulario online para que ellos mismos puedan invitar a otros artistas, de manera que la exposición vaya creciendo según visita otras localidades.
